Entrevista a Gonzalo Delgado y Verónica Perrotta

"La construcción de un personaje cinematográfico no es sólo actoral"

Foto: El Observador

¿Cuál fue la idea que dio origen al guión de Las Toninas Van al Este?

Vp: La idea de un padre gordo y una hija que no se ven hace tiempo y que llega a invadirlo en plan adolescente.

GD: Luego fue surgiendo la idea de que se relacionaron a través de las mentiras y ahí comenzó el verdadero desarrollo del guión. Lo que tenían en común era esa habilidad para fabular y eso es lo que los hace repelerse y al fin encontrarse.

¿Podrían describirnos un encuentro de trabajo cuando estaban desarrollando el guión?

Vp: Gonzalo muchas veces cocinaba y nos reíamos mucho. Hubo mucho de improvisar las escenas, de mostrarnos lo que pensábamos que debería ser.

GD:  Verónica es una gran dialoguista, tiene un talento increíble para el diálogo. Yo estaba más obsesionado con la estructura. Pero básicamente el trabajo era juntarnos y fantasear nosotros junto a los personajes. La única manera de que ellos se soltaran era si nosotros también soltábamos la piola y dejábamos correr la fantasía.

¿Cuáles fueron los otros títulos que tuvo el proyecto?

Vp: «Las astillas» fue el primero, ni bien apareció “Las toninas…” fue muy difícil de cambiar, y probamos muchas cosas.

GD: Las toninas viene de una frase que escuchaba en la infancia en verano, en Maldonado. Supimos desde el primer momento que podía tener difícil recordación y resultar extraño. Intentamos muchos otros títulos, incluído «Por dos sanguches cagados» peor al final las Toninas siempre prevaleció. Tiene algo que apela a lo emocional que es a lo que también aspira la película.

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¿Qué referencias tuvieron a la hora de imaginar la película?

Vp: Esperando la carroza (1985). Gloria (2013), una chilena. Paraíso amor (2012), de Ulrich Siedl.

GD: Es un poco injusto hablar de referencias, porque uno hace desde un montón de cosas que ha visto.  Pero sin duda hay algo en el tono y en la estética de Esperando la Carroza que nos unía.

¿Cómo fue co-dirigir para ustedes? ¿En que se concentró cada uno?

Vp: Fue algo natural que fue llegando, de mucha confianza y entender que éramos un equipo. Estuvimos muy de acuerdo siempre. La dirección tiene muchos momentos… concentrarnos creo que nos concentramos en todo.

GD: Concentrar nos concentramos en todo ambos, tal vez cada uno por su experiencia pudiese desenvolverse mejor en uno o en otro aspecto, pero nunca ninguno delegó en otro ninguna decisión, siempre nos consultabamos en todo, a veces solo con la mirada… Digamos que después del conocimiento de uno con el otro durante el guión, lo que logramos fue tener una confianza muy grande en el otro y eso casi siempre deriva en estar de acuerdo en casi todo.

¿Cuál es su momento preferido de la película?

Vp: Tengo varios. Me gusta mucho la escena de las bombas, recuerdo todo ese momento, cómo lo hicimos y me da mucha ternura. Me divierto muchísimo en la confitería cuando El Gordo grita como loco “¿Más cagadas? ¿Más cagadas?” Pero también para mí fue muy difícil la escena de la escalinata con Catherina y Heber y me parece que pasa algo potente ahí.

GD: Para mí es cerca del final, la despedida entre el padre y la hija, cuando ella abre el tupper con las bombas y descubre la nota que él le dejó. Todavía cuando lo vea me continua emocionando y eso me alegra mucho. Asi que esa es mi escena favorita.

Verónica Perrotta como Virginia en Las Toninas van al Este (2016)

Verónica Perrotta como Virginia en Las Toninas van al Este (2016)

 

¿Qué fue lo más agradable y lo más difícil del trabajo con Denevi? ¿Tuvieron que pulir tics teatrales?

Vp:  ¿Lo más agradable? Las charlas divertidas, los cuentos y compartir muchos cafés y pastafrolas.  Ahora no recuerdo momentos difíciles. A mí me parece que muchas veces se habla de las actuaciones “teatrales” de una manera que denigra otros estilos que no son el realismo. Nosotros quisimos atravesar esos momentos en la película, o sea que de pulir: nada.  Si su actuación en el Conrad fuera sobria la película no tendría ninguna gracia.

GD: Lo más agradable sin duda es haber podido compartir con Jorge todos los meses de ensayos y rodaje.  Es una persona que se abre completamente al otro desde un lugar con mucha libertad y alegría. Y eso al principio puede resultar avasallante, pero luego se vuelve algo maravilloso. Algo de lo que uno solo puede aprender y estra agradecido.

Para algunas personas la actuación de Denevi es exagerada, en cambio yo encuentro muchas variaciones, desde el viejo borracho, a la maricona histriónica, pasando por el abuelo baboso y el padre sincero… ¿Compusieron estas variaciones conscientemente?

VP: Contesto eso en la anterior.

GD: Desde el guión los cambios del personaje por sus acciones y diálogos ya vienen prefijados. Pero las variaciones actorales son un gran aporte del actor, en este caso Jorge. Él estuvo muy atento a la curva dramática de su personaje y tenía muy claro en qué escena ir hacia un lado más expresivo y en cuales ser más naturalista. Es lo que uno espera  que un actor haga y para mí Jorge lo hizo a lo grande.

Jorge Denevi como Miguel Angel García Mazziotti

Jorge Denevi como Miguel Angel García Mazziotti

¿Qué mecanismos tienen para trabajar su propia actuación frente a cámara? ¿Qué creen que es bueno evitar a la hora de actuar en cine? 

Vp: Siempre es distinto, es muy artesanal este trabajo para mí. Me gusta usar la ropa antes, sentir que esas cosas son mías.  Hay que estar con el otro en ese momento, esa es la concentración necesaria para mí.

Gd: Uno tiene que confiar en la cámara y en el montaje, por eso la insistencia de no sobre-expresar con gestos. La construcción de un personaje cinematográfico no es sólo actoral, está en el encuadre, en el orden de los planos, etc… por eso es fundamental apelar al proceso interno del personaje, encontrar las ideas y los sentimientos que vive en cada momento y confiar en el resto.

Darío, el personaje interpretado por Gonzalo Delgado

Darío, el personaje interpretado por Gonzalo Delgado

¿Qué toma fue la que tuvieron que tirar más veces? ¿Cuántas veces la filmaron? ¿Qué es lo que no salía?

Vp: No me acuerdo.

GD: Yo sí me acuerdo… fue una de las escenas más divertidas de la película, la llegada a la fiesta del Conrad… repetimos muchas veces el plano general que implicaba un movimiento de cámara y de extras. Nada importante, pero de todas formas en un momento se volvió un pantano. Pero como siempre pasa al fin estuvo hecha y luego todo fluyó.

¿Qué proyectos cinematográficos tienen por delante?

Vp: En breve se estrena Mulher do pai, la ópera prima de Cristiane Oliveira. Rodamos el año pasado en la frontera con Aceguá.

GD: Yo sigo participando con director de arte en varias peliculas y proyectos por filmarse y también como coguionista de varios.. ya veremos…

Afiche uruguayo de Las Toninas van al Este.

Afiche uruguayo de Las Toninas van al Este.

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